Trabajadora, amable, cariñosa, dulce, son muy pocas palabras para explicar como era la persona que se volcó conmigo desde muy pequeño, ya que mis padres trabajaban. Siempre tenía una sonrisa para mí cuando lloraba, un abrazo cuando lo necesitaba...
Muchas veces recuerdo cuando paseábamos por el parque de camino a casa, por la orilla de la playa o cuando me recogía del colegio.
Nunca se daba por vencida en las jodidas (perdón por la expresión) circunstancias en las que la vida nos trata con la punta del pie.
Por ser una bellísima persona, aquí te dejo este breve fragmento.......Siempre te querré.